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7.3.2. La escultura del Cinquecento en Italia: Miguel Ángel

En escultura destaca la figura de un artista: Miguel Ángel Buonarroti (1475-1564). Miguel Ángel es el mayor genio del siglo XVI. Destacó como arquitecto, urbanista, ingeniero, poeta y pintor. Pero él siempre se consideró a si mismo fundamentalmente un escultor. Sobresale en el estudio anatómico de los cuerpos.

Podemos destacar varias etapas en su producción artística.

a) Etapa de formación (1475-1497)

La formación de Miguel Ángel se realizó en Florencia en tiempos de Lorenzo el magnífico. Allí aprendió las técnicas desarrolladas por Ghiberti y Donatello, como la perspectiva lineal y el schiacciato. Las obras más tempranas destacan por sus virtudes clásicas: serenidad, armonía, gracia y dulzura. Un buen ejemplo de esta etapa es la Virgen de la Escalera, un relieve en mármol.

Miguel Ángel, Virgen de la Escalera
Miguel Ángel, Virgen de la escalera (hacia 1491. Casa Buonarroti, Florencia)
Imagen en Wikimedia Commons. Dominio público.

b) Primera etapa de madurez (1498-1504)

Por motivos políticos Miguel Ángel se trasladó a Roma. Allí realizó varias obras, en las que se conserva la gracia y la dulzura propias de su etapa de juventud. En la Piedad del Vaticano (1498-1499) Miguel Ángel representó en una composición triangular la dulzura y tristeza de una virgen juvenil, que sostiene en su regazo el cadáver de Jesús.

Entre 1501-1504, de nuevo en Florencia, Miguel Ángel esculpió el David, una gran estatua que representa al héroe bíblico en el momento en que se dispone a combatir contra Goliat. En la obra Miguel Ángel consigue aunar la serenidad clásica con la tensión dramática, que anticipa la evolución posterior del estilo de Miguel Ángel.

c) Segunda etapa de madurez (1505-1550)

Esta etapa se caracteriza por el desarrollo de dos características típicas del arte de Miguel Ángel.

  • El primero es el énfasis en lo dramático o terribilità, en el que tuvo una influencia decisiva el hallazgo de obras cumbres del arte helenístico, el Laoconte y el Hércules Farnesio.
  • El segundo es el recurso consistente en dejar la escultura inacabada (con el mármol sin pulimentar o con partes sin concluir en sus detalles, pareticularmente los rostros) a fin de potenciar la expresividad: es el inacabado o non finito.

El período está marcado por el encargo en 1505 del gran monumento funerario del Papa Julio II. El proyecto no llegó a terminarse y se convirtió en una fuente de frustración para miguel Ángel. Pero de él han quedado algunas esculturas entre las que destaca el magnífico Moisés (hacia 1515), que representa al líder bíblico del pueblo judío sentado con las tablas de la ley. Destaca su potencia expresiva, especialmente observable en la fiereza de su rostro, y su carácter heroico y monumental, plasmado en un cuerpo vigoroso y en torsión. Es la terribilità de Miguel Ángel.

Similares características vuelven a observarse en los sepulcros de Lorenzo y Juliano de Medici en la Sacristia nueva de San Lorenzo (Florencia). Los dos difuntos aparecen flanqueados por representaciones del Día y la Noche y de la Aurora y el Crepúsculo. De nuevo encontramos la concepción heroica, el vigor físico y la potencia expresiva que caracterizan la terribilità, así como el uso del non finito, particularmente visible en el rostro del Día.

d) Etapa de vejez (1550-1564)

Durante esta etapa Miguel ángel profundiza cada vez más en la búsqueda de la expresividad y en el inacabado, alejándose crecientemente del ideal renacentista y anunciando en muchos aspectos inquietudes propias del arte contemporáneo. El artista se concentra en variaciones de un mismo tema, la Piedad, tratado siempre según el modelo de composición triangular. Se trata de la Piedad de la Catedral de Florencia (1550-1555), la Piedad Palestrina (1555) y la Piedad Rondanini (1564).